8 casas de arquitectura española de los años 50

Desde mediados del siglo XX hasta la actualidad, España ha sido testigo de una evolución arquitectónica notable que ha dado lugar a algunas de las casas más icónicas del país. En este recorrido, exploraremos la obra de arquitectos destacados y los proyectos que han dejado una marca indeleble en la historia de la arquitectura española, con especial énfasis en los galardonados con prestigiosos premios como los otorgados por el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) y el Premio de Arquitectura Contemporánea de la Unión Europea – Premio Mies van der Rohe.

Comenzamos nuestro viaje en la década de 1950, cuando España experimentaba una transición arquitectónica. 

Casa Ugalde (1951-1952)

Es un testimonio de la maestría de José Antonio Coderch en la integración de la arquitectura con el entorno. La residencia refleja el racionalismo catalán, con líneas limpias y una conexión armoniosa con la naturaleza. Caracterizado por su simplicidad estructural y una cuidadosa consideración del clima y la luz. Coderch logró equilibrar la modernidad con la identidad cultural catalana.

El reconocimiento del Premio COAM subraya su contribución al panorama arquitectónico español.

Casa Oswald (1952)

Diseñada por Matilde Ucelay Maórtua, es una obra arquitectónica ubicada en Madrid. Matilde Ucelay Maórtua fue una arquitecta española pionera, siendo la primera mujer en obtener el título de arquitecta en España.

La Casa Oswald, construida en 1952, es conocida por ser una de las primeras obras modernas en España. Matilde Ucelay diseñó la casa para el ingeniero alemán Oswald, de ahí su nombre.

Este edificio refleja las influencias de la arquitectura moderna de la época, con líneas sencillas y funcionales. A lo largo de su carrera, Matilde Ucelay Maórtua desarrolló un estilo propio que combinaba elementos de la vanguardia arquitectónica con sus propias interpretaciones.

La Casa Oswald es un ejemplo destacado del legado de Matilde Ucelay Maórtua en la arquitectura española, y su contribución ha sido reconocida como parte importante de la historia de la arquitectura moderna en el país.

Casa Catasús (1952-1953)

Otro logro de José Antonio Coderch. Construida entre 1952 y 1953 en Caldes d’Estrac, Barcelona. Demuestra su habilidad para integrar la arquitectura con el entorno, gracias al empleo de materiales naturales como la madera y la piedra. La funcionalidad y la sencillez estructural son características clave que definen la estética de la casa. La disposición de volúmenes y alturas crea una composición arquitectónica muy dinámica que contribuye a la singularidad y al atractivo visual.

Aunque no haya recibido premios específicos, su legado se manifiesta en la riqueza del patrimonio arquitectónico de Coderch y en su contribución al movimiento moderno en España.

Casa Sert (1953)

Un hito del racionalismo diseñado por José Luis Sert. Construida en 1953 en Barcelona, esta residencia no solo refleja la funcionalidad del movimiento moderno sino que también se erige como un testimonio de la renovación arquitectónica en la posguerra. 

Sert logra una arquitectura que se adapta a las necesidades de los habitantes sin sacrificar la estética. Se integra armoniosamente con su entorno urbano. A través de líneas limpias y una paleta de colores neutros, se convierte en parte del paisaje urbano sin perder su singularidad. Las formas geométricas y las texturas del hormigón se convierten en elementos distintivos de la arquitectura de la casa. Ventanas estratégicamente ubicadas conectan el interior con el exterior.

Reconocida por el COAM, la Casa Sert es un ícono de la síntesis entre arte y arquitectura y continúa inspirando a arquitectos y amantes del diseño.

Casa La Ricarda (1953-1963)

Colaboración ejemplar entre Antonio Bonet, José Antonio Coderch y Manuel Valls. Construida entre 1953 y 1963 en El Prat de Llobregat, Barcelona. La casa es un testimonio del modernismo catalán y de cómo la colaboración creativa puede dar lugar a una residencia excepcional. Destaca por su simplicidad y conexión con la naturaleza. Aunque no ha recibido premios específicos, su diseño atemporal la coloca entre las obras maestras de la arquitectura española y un referente para arquitectos y amantes del diseño que buscan inspiración en la fusión entre la modernidad y la tradición.

El uso de materiales como el hormigón y la madera refleja la búsqueda de la simplicidad y la autenticidad en el diseño. Estos materiales no solo proporcionan solidez estructural sino que también añaden calidez a los espacios interiores.

Edificio Girasol (1957)

Diseñado por José Antonio Coderch en 1957 en Madrid. Se distingue por su forma y diseño únicos, que se alejan de las convenciones arquitectónicas de la época. La estructura cilíndrica y escalonada del edificio le otorga un carácter distintivo y una presencia escultórica en el paisaje urbano. 

Aunque el Edificio Girasol no ha recibido premios específicos, su legado radica en su papel pionero en la exploración arquitectónica y en la contribución de Sáenz de Oíza a la diversidad del panorama arquitectónico español. La obra destaca la capacidad del arquitecto para desafiar las convenciones y explorar nuevas formas, marcando así una huella significativa en la historia de la arquitectura moderna en España.

Casa Fernando Gómez de Durana (1959)

Diseñada por Sáenz de Oíza. A pocos kilómetros de Vitoria, se levanta esta vivienda unifamiliar de plata concentrada.

Se trata de una vivienda de planta concentrada que gira en torno a la chimenea y que busca la mejor respuesta a las exigencias climáticas y de uso. La disposición orgánica y funcional de los espacios, articulada mediante muros que se extienden hacia el exterior, configura tres áreas de actividad diferenciadas que se corresponden con las funciones de estar, dormir y servicios.

Un tejado a tres aguas cubre el conjunto, apoyado en tres pilares y en los muros de carga, y su contorno se recorta respondiendo a la organización en planta. Se proyectó un espacio de desván como futuro estudio, aprovechando el bajocubierta.

Villa Gloria (1959)

Diseñada por Fons Harnden & Bombelli Arquitectes en Cadaqués.

Villa Gloria es famosa por ser la residencia de Salvador Dalí durante muchos años. Dalí eligió Cadaqués como su refugio personal y lugar de inspiración. La villa se convirtió en un punto de encuentro para artistas, intelectuales y personalidades de la época. Su estructura es la típica de la arquitectura mediterránea, con sus paredes blancas y vistas impresionantes del mar. Situada en un entorno espectacular, Villa Gloria ofrece un ambiente único que ha atraído a visitantes y curiosos a lo largo de los años.

No ha sido reconocida con algún premio específico, sin embargo, su importancia radica más en su asociación con Salvador Dalí y su relevancia dentro del ámbito artístico y cultural.

Este recorrido por las casas más importantes de España entre 1950 y 1960 refleja la diversidad de estilos, enfoques y contribuciones de los arquitectos de la época, dejando un legado duradero en la arquitectura española.