The Sibarist

Madrid en cinco (nuevos) planes gastronómicos

A pocas semanas de terminar el año, las aperturas no dejan de sucederse. Madrid se ha convertido en el destino perfecto para los amantes del buen comer y el buen beber. Toma nota de estas cinco propuestas que no podrás perderte si pisas Madrid durante las próximas semanas.

¿Un bistró con alma madrileña?. Tendrás que sentarte en la sala, a medio camino entre un elegante bistró francés y un clásico bar madrileño de los años 60, de Chez Madrid, ubicado en la emblemática Plaza de Neptuno. ¿Amante de la cocina japonesa? Descubre la original propuesta de Li-Onna, una fusión que combina las raíces japonesas a través de los mejores ingredientes frescos de origen español y con los apasionados toques de la cocina de Latinoamérica. ¿Eres uno de esos parroquianos amantes de las las barras de bar? Tendrás que visitar la de Grupeta Bar, un original bar de bicis en el que desayunar unas tortitas “a la americana”, tomar el aperitivo o disfrutar de uno de los mejores sándwiches de roast beef de la ciudad. ¿Fan de la cocina libanesa? Reserva mesa en Aredna, un original restaurante que fusiona los sabores tradicionales del Líbano con toques propios de la gastronomía local. ¿Desconectar del centro de la ciudad y disfrutar de la auténtica cocina de producto? Tendrás que desplazarte hasta ‘La Moraleja’ para disfrutar de Aldama, el nuevo restaurante del chef José Carlos Fuentes, donde el producto de temporada se convierte en el protagonista.

CHEZ MADRID, UN BISTRÓ “A LA MADRILEÑA”

Restaurante Chez Madrid

Acaba de abrir sus puertas en la madrileña Plaza de Cánovas del Castillo, baja la atenta mirada de Neptuno, en los bajos del Hotel NH Collection Paseo del Prado. Una sofisticada sala, con interiorismo del estudio Proyecto Singular, en la que se entremezclan detalles propios de un elegante bistró francés y un clásico bar madrileño de los años 60. La propuesta gastronómica de Chez Madrid se compone de clásicas referencias que parten de algunos de los básicos de las barras madrileñas, como la ensaladilla rusa con encurtidos o la gilda de anchoa del Cantábrico y piparra, hasta elaboraciones de aires afrancesados como el croque monsieur o los mejillones servidos con crujientes patatas fritas. El comensal también encontrará guiños de bistró contemporáneo como la omelette de patatas hecha al momento o el croissant relleno de ensalada de cangrejo y salsa rosa, además de una variedad de quesos afinados o mariscos como las ostras francesas al natural. El menú continúa con verduras, guisos y pastas, como la ensalada Niza con atún de almadraba en aceite, encurtidos y huevo cocido; unas reconfortantes lentejas caviar estofadas con pato azulón o sabrosos macarrones al pesto rojo de tomates asados. Entre los pescados, destacan recetas como el lenguado A la Meunière o la sopa bullabesa. El solomillo Strogonoff, la chuleta de cerdo ibérico albardada con hierbas provenzales o el magret de pato con naranja y hojas frescas destacan entre su propuesta de carnes. El broche final lo ponen sus postres clásicos, como una delicada crème brûlée caramelizada, el cremoso flan de huevo y nata o el carpaccio de frutas de temporada, helado de vainilla y salsa templada de chocolate. ¡Bon Appétit!

LI-ONNA, COCINA JAPONESA CON ALMA LATINA

Restaurante Li-Onna

Con un acogedor, impactante y fotogénico interiorismo del arquitecto de interiores catalán Lázaro Rosa-Violán, Li-Onna se ha convertido en una de las aperturas más aclamadas de la temporada y en la que conseguir mesa se ha convertido en un asunto complicado. Un restaurante donde el sofisticado diseño, la original cocina y el ambiente  se convierten en los protagonistas. Su propuesta gastronómica de fusión combina a la perfección las raíces japonesas, a través de los mejores ingredientes frescos de origen español, con los toques apasionados de la cocina de Latinoamérica. Su apetecible carta presenta una cuidada selección de recetas japonesas clásicas, a las que se añaden tostadas, cortes de carne premium y sushi enriquecido con el inconfundible sabor latino. Platos como sus langostinos crujientes con alioli picante y cebollino, su jugoso y sabrosísimo tataki de res de lomo alto con coles de Bruselas, alioli de trufa, pozo y cilantro, el tartar de salmón servido con aguacate, jengibre, cebolla roja, ikura, tosazu jelly, cebollino y pan focaccia o su interminable selección de rolls, como el “Atomic roll” con salmón, langostino, cangrejo picante, sésamo tostado, salsa de soja dulce, cilantro, aguacate y queso crema. No podrás irte sin tomar postre y probar su original tarta de ube, un tubérculo de sabor dulce, servida con yogurt griego, crumble de almendra y helado de queso crema. No olvides preguntar por su divertida carta de cócteles, entre los que destacan su “Popstar”, un coctel a base de mezcal, pasaos, triple sec, vainilla y maracuyá.

GRUPETA, EL BAR DE BICIS DEFINITIVO

Restaurante Grupeta

Existe un bar para cada tipo de persona. Los parroquianos, buscan en ellos refugio y cobijo, ya sea en el primer café de la mañana, durante la caña después del trabajo o los largos aperitivos de los domingos entre amigos. Este, Grupeta Bar, acaba de abrir sus puertas en el número treinta de la madrileña calle Raimundo Férnandez Villaverde y ya se ha convertido en un bar perfecto para disfrutar de un relajado desayuno, no olvides preguntar por sus tortitas con sirope y bacon y su café de especialidad, su French toast con mascarpone y frutos rojos o el clásico pincho de tortilla; un comida distendida, allí encontrarás uno de los mejores sándwiches de roast beef de la ciudad, los clásicos torreznos o la tradicional fondue de queso con pan tostado; o un largo y relajado aperitivo durante los fines de semana. Además, su original interiorismo, inspirado por el universo ciclista y firmado por el estudio Bate, convierte a este nuevo local en un de bar clásico de toda la vida con una estética inspirada en los 60’s y 70’s revisada con diseños y materiales contemporáneos e industriales y un uso del color desenfadado que transforma el local por las noches. Los bares siguen siendo bares, pero han evolucionado. Ya lo cantó Gabinete Caligari, “Los bares, que lugares, tan gratos para conversar, no hay como el calor del amor en un bar”.

AREDNA, PARA AMANTES DE LA COCINA LIBANESA

Restaurante Aredna

Aredna, el primer proyecto culinario del chef libanés Ahmad Ismail, abre sus puertas en el número cinco de la céntrica calle Barceló, para ofrecer una experiencia que fusiona los sabores tradicionales del Líbano con toques propios de la gastronomía local. Su nombre significa “Nuestra tierra” en árabe y refleja, a la perfección, su esencia: una cocina que respeta la tierra, con productos frescos de temporada y una oferta gastronómica también apta, también, para veganos y vegetarianos. En su carta, el comensal encontrará versiones adaptadas de recetas tradicionales del Líbano, como el hummus con chistorra y piparra vasca, o un baklava de carne especiada y melaza de granada que rompe con la tradición dulce. También destacan propuestas que cuentan la historia personal de Ahmad Ismail, como la berenjena rustida con tahini, labné de hierbas, encurtido de cebolla roja y sésamo, inspirada en su infancia, o el steak tartar kibbeh al estilo Aredna, un plato que le trae recuerdos de las visitas a su familia en Líbano. A ellos se unen platos como la muhamarra de calabaza asada, pimientos de cristal, confit de ajo y nueces, el brioche relleno de shawarma de pollo, pepino encurtido, emulsión de pimentón y majado de hierbas, el kafta de cordero, tomate y cebolletas o el pulpo con babaganoush y encurtido de coliflor. En su interiorismo, minimalista, orgánico e inspirado en la tierra, predomina el uso de colores terracota y jarrones de barro que transmiten calidez y autenticidad en una atmósfera que consigue bajar las revoluciones, perfecta para relajarse.

ALDAMA, ODA AL PRODUCTO EN ‘LA MORALEJA’

Restaurante Aldama

“Cuentan las historias que, a principios del siglo XIX, la Marquesa de Aldama ya paseaba por los caminos de Alcobendas que pertenecían a su familia. Con un aura de elegancia y generosidad y una constante entrega a la comunidad”, cuentan desde el local. Su nombre,  Aldama, inspira este nuevo concepto gastronómico que acaba de abrir sus puertas en la Plaza de La Moraleja con el chef José Carlos Fuentes al frente de su cocina. La carta de este acogedor restaurante ofrece una selección platos emblemáticos (y premiados), como el rodaballo salvaje con fondo de sus espinas, espinacas y kikos, y nuevas incorporaciones, como la ostra Poget fine de claire con caviar Osetra de Bolshoi y tokaji o las originales vieiras con membrillo fresco, butifarra negra y aire de yuzu. Además de su carta, la experiencia en Aldama también puede vivirse a través de su menú degustación, formado por doce pases a elección del chef, permitiendo así poder explorar la variedad de sabores y técnicas que reflejan su esencia y  espíritu innovador. No olvides preguntar por su carta de vinos, diseñada por el sumiller Álvaro Prieto, que cuenta con más de 500 referencias, donde tienen representación muchas de las denominaciones de origen de nuestro país y cobra mucha importancia los caldos franceses. Su interiorismo, otras de las patas fundamentales de este cuidado proyecto, ha sido diseñado para crear una atmósfera que armonice con la naturaleza, utilizando materiales sostenibles como la madera, las fibras naturales como el lino, los colores neutros y las piezas de mobiliario minimalista.

Redactor: Álex de la Rosa

Álex es periodista y una referencia en el mundo de la gastronomía, creador del exitoso blog “Que no me la den con queso”.

El calendario, a finales de octubre, marca una fecha importante: el día internacional de la pasta. ¿Lo has celebrado ya frente a un buen plato de spaghetti, tortellini o gnocchi?
Septiembre es un mes de regresos. De vuelta tras días y semanas de desconexión, lejos del estresante ruido y movimiento frenético de la ciudad. Después de un relajado verano, volvemos cargados de nuevos propósitos y, claro, una larga lista de restaurantes (recién abiertos) que estamos deseando probar.