Siete balcones sobre el skyline del centro más efervescente

Con magnífica ubicación, la zona Malasaña- Conde Duque está siendo completamente redefinida, con hoteles de boutique y restaurantes de moda, en el marco de la nueva apuesta de la capital por reconvertir toda esta zona en un área netamente residencial, con la mejor oferta comercial, de restauración y cultural, a la altura de las principales capitales europeas. A este barrio lo limitan las calles de Princesa, Gran Vía, Fuencarral, Carranza y Alberto Aguilera. Ampliamente conocido por ser uno de los barrios más “trendy” de Madrid, es famoso por sus bares, tiendas vintage, librerías, restaurantes de los más diversos orígenes, mercadillos e historia, definen al barrio de Malasaña, el cual tiene mucho que ofrecer y que fue nada más y nada menos, que el icono de la mítica movida española en los años 70-80, donde bares como el Penta y Vía Láctea guardan gran parte de la historia contemporánea de la hermosa Malasaña. Históricamente, representa la resistencia de Madrid a la ocupación de los franceses con personajes como Manuela Malasaña (que da nombre al barrio), Daoiz y Velarde y localizaciones emblemáticas como la plaza del Dos de Mayo. La vivienda se encuentra en las cercanías de la Gran Vía y Plaza de España, que está siendo redefinida y va a convertirse en uno de los centros neurálgicos más atractivos de Madrid, una apuesta con hoteles de lujo, oferta cultural, en un entorno ajardinado y con algunos de los edificios más representativos de Madrid.

La orientación del inmueble sur y este, con dos fachadas en esquina y espectaculares vistas sobre los tejados de Malasaña. Luminosidad máxima al estar en la última planta.

Esta propiedad se encuentra en un entorno privilegiado, para los amantes de la historia que se sienten atraídos por las calles más populares de Madrid, los edificios de finales del XIX y principios del XX, en el Madrid más auténtico, entre uno de los últimos retos inmobiliarios y de reconversión de la capital, la plaza de España y el efervescente barrio de Justicia. Un espacio con mucho encanto, donde la sensación de amplitud por su altura de techos y vistas despejadas y la buena onda, están en todos los rincones. Siete balcones y un atractivo proyecto altamente rentable. 

La vivienda necesita una reforma integral que se puede abordar de manera personalizada o con el proyecto llave en mano en el precio indicado que contempla una redistribución completa para dotar a la vivienda de dos buenos dormitorios con sus baños y una magnífica área social con cocina de diseño, todo volcado al exterior a través de sus siete balcones con vistas espectaculares desde dos fachadas.  Instalaciones nuevas, aislamiento térmico y acústico, climatización oculta, calefacción individual y cocina equipada con electrodomésticos de gama alta.

El barrio de los Malasaña es siempre un valor seguro, por su elevada demanda ya muy consolidada y la inversión que se ha llevado a cabo en los últimos tiempos en acondicionamiento y renovación de fachadas, calles y plazas. Estamos ante una gran oportunidad de adquirir un inmueble muy singular, vanguardista y práctico en un entorno histórico.